6 de septiembre de 2010

Dar y recibir

Voy a ver y apoyar dos puntos de vista diferentes que Erich Fromm presenta y como hoy me levanté con ánimos de éste tema, voy a discutirlo conmigo y yo misma.
Por un lado dice:
El carácter mercantil está dispuesto a dar, pero sólo a cambio de recibir; para él, dar sin recibir significa una estafa.
Se supone que recibamos algo a cambio de lo que damos, como un tipo de motivación para el 'dar'. Poniendo un ejemplo cotidiano: Damos consejos a un amigo, esperando que en el momento en que lo necesitemos haya una retribución. ¿Es siempre así? No quiero irme de tema, pero la verdad es que esto no se cumple la mayoría de las veces, será por la actualidad y el cómo son las personas ahora, pero el porcentaje de gente que da, está abajo del 10% y el que recibe siempre tiene el resto del total. O sea que podría hacerse un perfecto círculo de dar y esperar que no terminaría, porque los que acostumbran a recibir, nunca van a dar, convencidos de que lo hacen. ¿O no?.

Por el otro:
No da con el fin de recibir; dar es de por sí una dicha exquisita.
Acá no hay que esperar nada a cambio del dar, que sería lo correcto. Pero, si somos todos iguales, ¿por qué algunos pueden recibir sin dar y los que dan no tienen que pretender una retribución de su 'favor'?. Acá entonces el tema para irse de las ramas no es la ceguera de las personas, sino la desigualdad. Y con ésto ya no toco el tema de el consejo para un amigo, me refiero a grandes formas de dar, como actos que ayuden a la humanidad y tal. En ese caso no tendríamos a nadie que nos de algo, pero cuando se trata de personas es todo un tema diferente (si fuera el caso del amigo).

Así como éste enorme dilema me inquietan muchísimos más y éste hoy en especial porque me topo con gente que da asco su forma de ser, pero uno lo sigue considerando, le da, le da, y le da. Pero... no es que directamente no agradece, lo ignora completamente, o hasta a veces no acepta las ayudas.


0 comentarios:

Publicar un comentario